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El agua es uno de los mejores medios para la rehabilitación gracias a sus propiedades físicas: la flotación reduce el impacto en las articulaciones, la viscosidad ofrece una resistencia natural que fortalece los músculos y la presión hidrostática favorece la circulación y la relajación muscular.
Por todo ello, la terapia acuática es una herramienta eficaz en la mayoría de los procesos de rehabilitación. Está indicada en personas con diferentes tipos de discapacidad y en múltiples patologías, ya que ayuda a:
  • Reducir el dolor y la rigidez articular.
  • Disminuir los espasmos musculares.
  • Mejorar el arco de movilidad y la flexibilidad.
  • Aumentar la fuerza muscular y la coordinación.
  • Favorecer la autonomía y la calidad de vida en la vida diaria.
Se trata de una actividad accesible para todas las edades y abierta a la diversidad funcional en todas sus variantes: física, sensorial, intelectual u orgánica.
En C.D. Adapta Zaragoza, este programa está dirigido por personal especializado y se desarrolla en las piscinas municipales de Siglo XXI y Alberto Maestro a lo largo de todo el curso.
La terapia acuática no es solo un tratamiento de rehabilitación, sino también un espacio de inclusión, bienestar y superación, donde cada persona avanza a su ritmo en un entorno seguro y motivador.
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